Características de la Automatización en la Smart Factory

La automatización en la Smart Factory es una piedra angular de la digitalización en las empresas industriales. Este artículo explora las características que definen esta revolución: desde la eficiencia operativa hasta la calidad mejorada, la automatización está dando forma al futuro de la fabricación.

Explora las características clave de la automatización en una Smart Factory.

No es un concepto nuevo, puesto que la automatización ha impulsado la eficiencia operativa de los entornos industriales desde hace mucho tiempo. Sin embargo, las características de la automatización en la Smart Factory están haciendo que la innovación en la fabricación de los entornos industriales sea mucho más rápida.

Esto es debido a que la Smart Factory o fábrica inteligente se está beneficiando de la incorporación de diferentes tecnologías que consiguen unos procesos eficientes, una mejora de la calidad de los productos y una optimización de recursos. Son tecnologías como la robótica industrial, el Internet de las cosas (IoT), la integración de sistemas o los diferentes tipos de automatización industrial las que están permitiendo una evolución muy rápida como no se conocía desde el inicio de la primera revolución industrial.

La automatización en la Smart Factory tiene, por tanto, diferentes características que la hacen diferente a otros procesos del pasado. Algunas de esas claves son las siguientes:

Eficiencia operativa

Una de las características más destacadas de la automatización en la Smart Factory es la capacidad que tiene para impulsar la eficiencia operativa a unos niveles que no habían sido vistos hasta el momento. Y es que la producción automatizada permite la ejecución de aquellas tareas más repetitivas. Con ello se minimizan los errores y se reducen de forma drástica los tiempos de inactividad gracias a que los sistemas de control automatizado garantizan que las operaciones se ejecuten de manera constante lo que conduce a una mayor productividad y una menor variabilidad en la producción.

Flexibilidad y adaptabilidad

La flexibilidad y adaptabilidad son dos de las características fundamentales en la innovación tecnológica de la Smart Factory y la han convertido en un modelo que permite, por ejemplo, mejorar la cadena de suministro o la obtención de una reducción de costes. Gracias a la flexibilidad que proporciona la automatización las fábricas pueden ajustarse y adaptarse a cambios en la producción, de tal forma que se pueden alterar los volúmenes de producción o incluso cambiar el diseño de un producto de manera sencilla y eficiente.

Si la flexibilidad es importante, la adaptabilidad va a jugar un papel cada vez más importante. Soluciones como Smart Factory by aggity, que incorpora tecnología de machine learning e inteligencia artificial permiten que las empresas puedan analizar datos en tiempo real para identificar problemas de producción y evitar pérdidas, predecir fallos en la maquinaria y optimizar los procesos de manera continua. Gracias a ello se consigue la excelencia en la fabricación inteligente.

Al poder ejecutar una monitorización en tiempo real, el proceso de producción significa analizar y presentar los datos de producción para poder tener una visión de detalle.

Reducción de errores

En los entornos industriales tradicionales los errores humanos son comunes. Con la adopción de la automatización, esos errores prácticamente desaparecen. Esta es una de las claves que caracterizan a la industrialización 4.0 ya que los sistemas automatizados pueden ejecutar tareas repetitivas y de alta precisión sin fatiga ni errores, lo que se traduce en una mejora de la calidad del producto y en una productividad aumentada.

Asimismo, la automatización minimiza la necesidad de recursos para el control de calidad y la gestión de problemas de producción, lo que conduce a un ahorro significativo en los costes.

Seguridad mejorada

Finalmente, otra de las características de la automatización de la Smart Factory más importantes es la que tiene que ver con la seguridad. Uno de los beneficios más evidentes es la reducción de la exposición de los trabajadores a riesgos laborales ya que esas tareas más peligrosas pueden ser realizadas por robots, de tal forma que el empleado no tenga que enfrentarse a labores potencialmente peligrosas y pueda dedicarse a tareas de mayor valor para las empresas.