Ciberseguridad en el trabajo en movilidad
La conectividad que facilita la tecnología permite que muchos empleados pueden llevarse su oficina allá donde vayan, pero también están más expuestos a las ciberamenazas.
Un ciberataque no solo es capaz de poner en una situación crítica los resultados económicos de una empresa, también cuestiona su reputación y su gestión.
Los tiempos en los que las empresas solo se preocupaban por la seguridad de sus instalaciones físicas han quedado atrás. La conectividad que facilita la tecnología permite que muchos empleados pueden llevarse su oficina allá donde vayan. Además, la implantación del teletrabajo en los últimos años y la disponibilidad de dispositivos cada vez más versátiles han contribuido a que el puesto de trabajo se extienda más allá de las cuatro paredes de la oficina.
Este nuevo escenario ofrece varias ventajas, pero también surgen nuevos riesgos y amenazas, como la pérdida de datos o la exposición de información confidencial a personas ajenas a la compañía. Además, el acceso permanente desde dispositivos personales a los recursos de la empresa, como el correo electrónico, provoca un aumento de los peligros.
Por eso, es imprescindible que tanto empresas como trabajadores adopten unas medidas básicas de seguridad para evitar sufrir ataques. Desde el Instituto Nacional de Ciberseguridad (Incibe) ofrecen los siguientes consejos:
- Elegir contraseñas robustas, que no aludan a información personal, con un mínimo de ocho caracteres y que incluyan mayúsculas, minúsculas, número y algún símbolo alfanumérico.
- No usar redes wifi públicas, como las disponibles en hoteles y restaurante, ya que habitualmente son menos seguras y aumenta los riesgos de intrusión cuando se realiza una conexión a la red corporativa.
- Evitar la exposición de la pantalla del dispositivo en lugares públicos, como en un viaje en tren, en avión o un restaurante, sobre todo si se está trabajando con información confidencial, ya que no sabemos quién puede estar sentado al lado.
- Ser cautos cuando se mantenga una conversación telefónica, por las misma razón que en el punto anterior: si se están tratando algún asunto crítico para la empresa lo recomendable es hacerlo en un lugar lejos de personas desconocidas.
- Emplear conexiones cifradas cuando se recurra al teletrabajo para evitar robos o pérdidas de información.
- Utilizar equipos seguros, como mínimo que tengan instalado un firewall para reducir el número de amenazas a la que están expuestos y que personas ajenas puedan espiar las comunicaciones.
Desde el Incibe recomiendan empezar por estos sencillos pasos para blindarse ante posibles amenazas. Un ciberataque no solo es capaz de poner en una situación crítica los resultados económicos de una empresa, también cuestiona su reputación y su gestión. De ahí que, en cualquier proceso de digitalización, sea imprescindible definir y desarrollar una estrategia de ciberseguridad que reduzca los riesgos y se implante de manera trasversal.
Una solución como Cloud & Cibersecurity by aggity permite, por un lado, contar con medidas preventivas de protección, pero también disponer de las herramientas necesarias para reaccionar de forma adecuada en el caso de un ataque. De esta forma se evita un impacto irreversible y una parada total o parcial de la actividad.