La COVID-19 acelera la digitalización
El nuevo contexto creado por la propagación del coronavirus ha acelerado los planes de digitalización de la mayoría de las empresas, que han tenido que desarrollar nuevas estrategias para mantener su productividad.
Un 60% de las empresas españolas tiene previsto aumentar la inversión en planes de digitalización durante los próximos meses.
El uso de la tecnología está desempeñando un papel fundamental desde el inicio de la pandemia del coronavirus. Tras las restricciones a la movilidad durante las primeras semanas y la posterior recomendación de mantener la distancia física, todas las actividades productivas que lo permitían han recurrido al uso de herramientas digitales para seguir ejerciendo su trabajo. Un escenario para el que la mayoría de los negocios no estaban preparados y que ya se está viendo reflejado en sus planes para los próximos meses.
En la edición especial COVID-19 del ‘Barómetro de Empresas’, que elabora desde 1999 la consultora Deloitte, se incluye una comparación sobre cómo los panelistas verán afectadas sus inversiones durante el año 2020 a consecuencia de la crisis en relación a 2019. El estudio recoge los resultados de un cuestionario dirigido a las 2.400 empresas españolas con mayor facturación en cada sector.
En la categoría de digitalización, un 60% de los encuestados considera que estas inversiones aumentarán, frente al 34% que mantiene que no habrá cambios y el 6% que señala que disminuirán. La segunda con un mayor porcentaje es seguridad, un 52% de los panelistas considera que las inversiones crecerán, un 45% que se mantendrán y un 3% señala que disminuirán.
Adopción tecnológica acelerada
El nuevo contexto creado por la propagación del coronavirus ha acelerado los planes de digitalización de la mayoría de las empresas. Las compañías han desarrollado nuevas estrategias para mantener su productividad sin perder de vista que el teletrabajo, el comercio electrónico, la educación telemática, el entretenimiento a distancia o la telemedicina han llegado para quedarse.
Esto ha derivado en la rápida adopción de algunas tendencias tecnológicas, sobre todo de aquellas que tienen que ver con la limitación de los contactos personales, tal y como se recoge en el informe ‘La sociedad postpandemia: la tecnología como vector del cambio’, desarrollado por The Valley. En este estudio apuntan cómo el trabajo a distancia es posible gracias a tecnologías que incluyen redes privadas virtuales (VPN), voz sobre protocolos de Internet (VoIP), reuniones virtuales, tecnología cloud, herramientas de colaboración e incluso reconocimiento facial.
Las tecnologías que intervienen en el aprendizaje a distancia son similares a las del teletrabajo e incluyen otras como realidad virtual (RV), realidad aumentada (RA), impresión 3D y robots impulsados por Inteligencia Artificial. Mientras que en el ámbito de la telemedicina, los dispositivos personales de IoT para rastrear las constantes vitales y los chatbots para hacer diagnósticos iniciales son las herramientas que acelerarán su implantación. En el negocio del entretenimiento, la retransmisión de conciertos online ha ganado fuerza en todo el mundo en estos meses y los museos y otros espacios de ocio ofrecen visitas virtuales incluso con tecnología de RV.
El momento actual es ya un punto de inflexión que cambiará la manera en la que nos relacionamos, trabajamos, consumimos, aprendemos y hacemos uso de todo tipo de servicios. La tecnología será el factor que impulse esa transformación hacia entornos más digitales que permitan a las empresas ser más resilientes en el futuro.