Resiliencia: la clave ante situaciones adversas
En los entornos de trabajo las dificultades surgen constantemente, por lo que las empresas buscan profesionales que no se asusten ante la adversidad y que, además, sepan sortearla con creatividad.
Con un análisis preciso de los datos, las empresas pueden diseñar estrategias para fomentar esta habilidad entre los trabajadores y potenciar la resiliencia ante situaciones adversas.
La resiliencia es la “capacidad de adaptación de un ser vivo frente a un agente perturbador o un estado o situación adversos”, tal y como se recoge su definición en el Diccionario de la Real Academia Española (RAE). El estado de emergencia declarado por la pandemia de la COVID-19 y el actual contexto está poniendo a prueba la resiliencia de personas y empresas. Su capacidad, al final y al cabo, de afrontar y recuperarse ante una situación adversa.
La resiliencia en el mercado laboral constituye una de las competencias clave que se ha venido destacando en los últimos meses y que ahora adquiere más relevancia si cabe. En la ‘Guía 20 competencias contra la exclusión laboral’, desarrollada por la Fundación Adecco, la resiliencia se recoge como uno de los atributos más demandados por las compañías.
En los entornos de trabajo las dificultades surgen constantemente, por lo que las empresas buscan empleados que no se asusten ante la adversidad y que, además, sepan sortearla con creatividad, saliendo reforzados. Los profesionales resilientes tienen control sobre sí mismos, aceptan los cambios y son capaces de transformar las dificultades en nuevas oportunidades para el crecimiento personal y empresarial. Por todo ello, resultan muy rentables para las organizaciones, según se afirma en la citada guía.
Claves para ser una empresa resiliente
La crisis del coronavirus ha sacado a relucir las ventajas y beneficios de contar con empleados con esta habilidad para superar una situación tan complicada e inesperada. Una competencia que se puede detectar durante los procesos de selección de personal o que los empleados pueden adquirir a lo largo de su carrera profesional a través de los programas de formación de las propias compañías.
Un reciente encuentro organizado por AON España y la publicación RRHHDigital en el que se dieron las claves para implantar una cultura de resiliencia en las empresas y tratar de superar las dificultades actuales, tanto a nivel organizativo como individual, y se mencionaron cuatro puntos fundamentales:
- La adquisición de aprendizajes y nuevas habilidades
- Saber liderar virtualmente y con empatía
- La comunicación es vital
- Colocar a las personas en el centro y tener un propósito organizacional
A día de hoy las empresas cuentan con multitud de datos de sus empleados que les permiten llevar a cabo la mejor gestión posible en los cuatro aspectos enumerados. A través de un análisis preciso de los mismos, con una solución como BesTalent IA by aggity, pueden disponer de la información necesaria para ofrecer programas de formación que se adapten a las capacidades de sus trabajadores y respondan a los requerimientos de la organización. Además de establecer vías de comunicación para crear una relación más fluida y transparente con los empleados e identificar el talento que mejor responde a la cultura de empresa.
La capacidad de resiliencia ante situaciones adversas que se escapan a cualquier plan de negocio resulta esencial para asegurar el éxito y competitividad de una organización. Fomentar esa resiliencia no solo ha de formar parte del aprendizaje de los empleados, también de las empresas para poder afrontar el futuro con más seguridad.