Social Business: La mejor manera de abordar la transformación digital de las empresas

 

Es un objetivo al que hay que llegar a toda costa. La transformación digital supone cambiar el enfoque sobre los negocios, los clientes y el personal en las organizaciones, lo que implica una evolución de los modelos de gestión. De lo contrario, las empresas corren el riesgo de quedar apeadas de una carrera que ya está en marcha y avanza a gran velocidad.

Cómo abordar la Transformación Digital

En todos los foros y eventos sobre TI y gestión empresarial el concepto de transformación digital acaba siendo un mantra. Pero ¿por dónde empezar y qué cambiar? La tentación de cambiar todo y hacerlo de golpe conducirá al fracaso y a costes excesivos puesto que las empresas ya tienen tecnologías digitales, poseen una infraestructura TIC determinada y están compuestas por personas que, además de ser fundamentales en este proceso de transformación digital, han de adaptarse a él y a la nueva cultura.

En este caso, ¿es posible una transformación digital gradual?, ¿un proceso suave que se vaya extendiendo por toda la organización?, ¿existe alguna fórmula que permita ir midiendo su impacto, en los recursos humanos y el negocio? La respuesta: sí.

En esta afirmación entra en juego, con un papel esencial, un nuevo concepto que la sociedad ha adaptado antes incluso que las empresas: Social Business. No hablamos de tecnologías costosas y sofisticadas, sino de tecnologías fáciles de explicar y adoptar, inspiradas en las herramientas de relación social más extendidas en el mundo; sencillas de implantar y, además, con un coste reducido, teniendo en cuenta la rapidez con que impactan en la organización (ahorro de costes, motivación del personal, satisfacción de los clientes, etc.). Este impacto es, además, transversal en todos y cada uno de los departamentos de la compañía y sus procesos.

No puede haber transformación digital sin antes ser Social

La transformación digital es un proceso, no un fin, que afecta a toda la organización. Por eso, precisa de su implicación y participación. Una empresa no podrá ser digital si antes no es social. Con un enfoque Social Business, con soluciones y herramientas de este tipo, conseguimos socializar la gestión e involucrar en este nuevo modelo al ecosistema completo de la organización: empleados, colaboradores, clientes, proveedores, distribuidores, partners, procesos de negocio y recursos como, por ejemplo, la maquinaria, si hablamos de un entorno industrial.

Con los socios y los proveedores adecuados, lo que puede parecer muy complejo resulta extremadamente sencillo. Se trata de aprovechar el conocimiento y uso masivo que los empleados hacen de todo tipo de herramientas de comunicación, colaboración y redes sociales y trasladarlo a un entorno seguro y confidencial dentro de la empresa. En paralelo, hay que ser capaz de combinarlas y conectarlas con los sistemas transaccionales y de gestión tradicionales (ERP, CRM, CMS), tecnologías de movilidad, análisis inteligente de la información (Big Data) e IoT.

Las tecnologías incluidas en el concepto de Social Business y el nuevo ecosistema organizativo social y colaborativo que introduce en las empresas permiten una adopción muy rápida por los miembros de la organización, sean internos (trabajadores) o externos (clientes, proveedores, distribuidores), por lo que su amortización y el retorno de la inversión es casi inmediato.

Transformación digital: Social business

Los beneficios del Social Business

Sobre transformación digital y Social Business, son muchos los estudios que constatan que una mejor comunicación y colaboración basada en el uso de tecnologías sociales es capaz de aumentar la productividad entre un 20% y un 25%.

Las organizaciones que ya están experimentando este nuevo modelo apuntan que las tecnologías y soluciones Social Business aplicadas a los procesos de transformación digital permiten: una gestión más ágil, dinámica y efectiva, reducir costes de gestión, crear nuevas oportunidades de negocio, impulsar la innovación corporativa, acelerar la venta de nuevos productos y servicios, mejorar el impacto de las campañas de marketing y promoción, aumentar la transparencia y el conocimiento colectivo y mejoras significativas a la hora de localizar y potenciar el talento dentro de la empresas.

Escrito por BDI Comunicación