La fábrica inteligente y sus problemas con la cadena de suministro

La fábrica inteligente y sus problemas con la cadena de suministro

La evolución hacia la fábrica inteligente es una prioridad de las organizaciones industriales. Sin embargo, no gestionar la transformación de forma correcta puede provocar dificultades en la cadena de suministro.

En numerosas ocasiones, las iniciativas para el desarrollo de la fábrica inteligente están desconectadas del resto de la cadena de suministro.

La fábrica inteligente es la evolución más importante que ha experimentado el sector industrial al mejorar la eficiencia de los procesos productivos. Se trata de uno de los elementos esenciales que forman parte de la denominada Industria 4.0 y que se beneficia de tecnologías avanzadas como el empleo de la Inteligencia Artificial, el Internet de las Cosas (IoT), el uso de robots o la analítica de datos para automatizar y optimizar determinados procesos. La fábrica inteligente en la Industria 4.0 aporta innumerables beneficios a las organizaciones, pero también presenta desafíos significativos, sobre todo en lo que se refiere a la gestión de la cadena de suministro.

Retos para la cadena de suministro

Recorrer el camino que lleva a la fábrica del futuro para la Industria 4.0 no es una tarea sencilla ya que, de no realizarse la transformación de la forma adecuada, puede acrecentar los problemas de logística y cadena de suministro. A menudo, las organizaciones cometen una serie de errores en la transición hacia un entorno de fábrica inteligente.

Uno de los principales fallos tiene que ver con la tendencia a confundir la optimización de la fábrica con la transformación del modelo de negocio. La implementación de tecnologías avanzadas como, por ejemplo, la tecnología 5G, mejora la eficiencia y la productividad de una fábrica, así como la gestión de la cadena de suministro, pero la evolución hacia la fábrica inteligente implica cambios más profundos en la forma de operar de la organización.

Retos para la cadena de suministro

La adopción de tecnologías inteligentes no garantiza que el modelo de negocio se vaya a transformar de forma inminente. Para que el desarrollo de la fábrica inteligente funcione es necesario planificar una estrategia que considere aspectos como las ventajas que va a suponer la implementación de un determinado proceso, la afección que va a tener sobre los empleados, si se va a producir un retorno de la inversión, etc. Además, en numerosas ocasiones, las iniciativas para el desarrollo de la fábrica inteligente del futuro están desconectadas del resto de la cadena de suministro, por lo que los beneficios que pueda proporcionar en una sección de la fábrica se convertirán en restricciones costosas en otras partes del negocio.

Para evitar este error tan común en el desarrollo de una fábrica inteligente para la industria 4.0. es fundamental contar con un socio como aggity, que ayude con el diseño de una estrategia adecuada para la fábrica y que incorpore soluciones completas como Smart Factory by aggity, que cubran de forma satisfactoria todas las necesidades de cualquier fábrica.

Gestionar el cambio

Otro de los errores habituales en la evolución hacia la fábrica inteligente es subestimar los cambios que se van a producir en los procesos o la dificultad de realizar las nuevas integraciones. Esto puede derivar en un incremento de los costes, así como un aumento del tiempo de implementación. Hay que tener en cuenta que una smart factory tiene que ser una infraestructura resiliente y sostenible y, para ello, tiene que operar con múltiples protocolos de comunicación y tecnologías heterogéneas, que no debe generar incompatibilidades y retrasos en la cadena de suministro. Por ello, es conveniente llevar a cabo una alineación entre el liderazgo senior y la utilización de equipos de mejora continua para garantizar que las iniciativas se secuencian correctamente.

Alinear IT/OT y gobernanza

Alinear IT/OT y gobernanza

El objetivo de cualquier fábrica inteligente es conseguir que la cadena de suministro sea más ágil y eficiente, también desde el punto de vista de los costes, donde la factura energética es un aspecto capital. Sin embargo, a medida que se introducen más tecnologías y procesos automatizados en la fábrica, la cadena de suministro se vuelve más compleja. La gobernanza de las fábricas inteligentes no sólo se centra en las conexiones planta-negocio, sino también en cómo se gestionan la TI, la tecnología operativa (OT) y la tecnología de ingeniería (IT).

Por ese motivo, es esencial que los responsables de gestionar la cadena de suministro incorporen modelos organizacionales alternativos para la alineación de IT/OT y evolucionen hacia estructuras organizativas y de gobierno en línea con los nuevos modelos de producción.